Igual he tenido mala suerte con los animales racionales con los que he tratado.
Pero les aseguro que conozco animales irracionales con mejores sentimientos e intenciones que estos.
No quiero escribir sobre la defensa de los animales irracionales; defensa de la que son absolutamente merecedores; es evidente que solo matan para comer no por pura diversión, y no me refiero solo a las corridas de toros, si no a todo aquel que para divertirse mata o hace sufrir a un animal: peleas de gallos, cazadores, doma en los circos o incluso en los zoológicos y como no…….. los que descargan con ellos sus frustraciones y violencia.
Somos malos, ya ven que me incluyo en el grupo, al fin y al cabo también soy un animal racional y durante muchos años he creído en los supuestos buenos sentimientos de mis semejantes, craso error, como siempre he pecado de ingenuidad.
Solo simulamos; por eso nos gustan cosas como la literatura, el teatro o el cine, representan lo que nos gustaría ser, y tenemos la desfachatez de decir que “eso” además es “cultura”.
Indudablemente hay grados de maldad; no es verdad que hay cierto narcisismo en esa supuesta bondad para con los otros por sentirnos mejores de lo que realmente somos o solamente es por falta de oportunidades.
Hay verdaderos especialistas en crear problemas para después solucionarlos y poder presentarse ante los demás como auténticos triunfadores al resolver los conflictos que ellos solitos han creado…………y los demás no somos mejores que ellos, con tal de no pensar, de no contrariar a esos manipuladores nos lo creemos , o al menos intentamos no pensar seriamente en ello.
Espero que el día que seamos capaces de recapacitar sobre lo que estamos creando aun tengamos posibilidades de enmendar.